Todo empezó cuando Kyle Bice, artista independiente de Chicago, llegó en una reunión regular de artistas en un pub de su ciudad sin sus herramientas de trabajo. Se las había descuidado en casa y solo llevaba un pincel de acuarela en su bolsa. En esta situación, Bice se le ocurrió que la cerveza podía ser una buena sustituta de sus materiales habituales. “Fue un especie de accidente extraño”, explica el pintor en el diario Vinepair.
El experimento no le salió mal y empezó a utilizar bebidas en sus obras. “Soy un gran bebedor de cerveza artesana pero nunca me hubiera imaginado acabar pintando con ella”, comenta el artista. Aparte de la cerveza, Bice también utiliza vino, café y otras bebidas en sus pinturas.
Una de las primeras obras con cerveza del artista fue para el brewpub New Holland Brewing. Utilizó una Imperial Stout, llamada Dragon’s Milk. A partir de ese momento, le encargaron varias obras para promocionar los eventos del local. Como Bice, también hay otros artistas que han experimentado con la cerveza a la hora de plasmar sus obras, de hecho, en muchos de ellos se ha convertido en un material habitual.
Es el caso de Karen Eland, de Oregón, que empezó pintando con café. “Estaba en una cafetería y me gustó el color del café expreso que me estaban sirviendo, pensé que era realmente bonito”, explica Eland y añade que “intenté pintar con café expreso y luego con café molido, salió muy bien y me aficioné a utilizarlo en mis obras”.
Después de probar con el café, Eland quiso hacer un paso más y añadió la cerveza. En estos momentos ya tiene en su colección más de 200 obras hechas con cerveza. “Cuando termino una obra que he utilizado cerveza Stout o café expeso, tengo que olerla para saber con que esta hecha” y comenta que “los cafés huelen bien pero hay que reconocer que las cervezas huelen a cerveza vieja”.
Aparte del olor otra de las diferencias que distingue pintar con cervezas respeto a otras bebidas es que estas terminan más pegajosas que otros líquidos, y son más brillantes cuando están secas. Los artistas recomiendan que se utilicen las cervezas más oscuras y también aconsejan pintar con las cervezas a temperatura más alta de la que estamos acostumbrados a beber.
También es importante saber que como la cerveza y el café son líquidos, no pinturas, se tiene que esperar que cada capa se seque por completo. Por este motivo, muchos artistas usan secador de pelo porque si no se necesita mucho tiempo de espera.
Comentan que “como el papel no absorbe la cerveza por completo, cuando se seca, aparecen manchas extrañas que parecen errores pero no lo son, simplemente con agua se tiene que manipular los bordes para poder dar las formas que gusten más y mover el color hasta que se vea como quieres”. Estos artistas aconsejan que lo importante no es frustrarse por haberla fastidiado, lo realmente importante es experimentar y divertirse.
En este vídeo se puede ver a Kyle Bice utilizando cerveza para hacer un retrato: