El sector de la cerveza artesana en Francia esta de celebración. La Asamblea Nacional ha aprobado este pasado miércoles la obligación de establecer en la etiqueta de las cervezas el nombre y la dirección del productor. “Esta decisión permitirá a los consumidores probar cervezas y a la vez estar perfectamente informados sobre su origen” ha aplaudido en un comunicado Jean François DROUIN, presidente del Sindicato Nacional de Cerveceros Independientes (SNBI) del país.
El SNBI ha sido el impulsor de esta enmienda que obliga a todas las cerveceras, ya sean industriales o artesanales, a llevar en su etiqueta de forma predominante el nombre y dirección del productor. François ha explicado que “cuando se presentó, en 2019, el proyecto de ley ‘Egalim’ el sindicato francés propuso inmediatamente añadir un artículo sobre la transparencia en el etiquetado de las cervezas”. Esta normativa también es conocida como la ley para la Agricultura y la Alimentación. En ella se establecen, entre otras, algunas medidas para el suministro sostenible de alimentos y la prohibición efectiva de ciertos plásticos.
Thierry Benoit, de la provincia francesa Ille-et-Vilaine, ha sido el diputado encargado de defender la enmienda presentada y aprobada por unanimidad. El sindicato ha recibido con mucho entusiasmo su incorporación y prevén que pronto se extenderá a otros productos alimenticios porque “los consumidores deben estar claramente informados”.
Este es un gran avance para el sector de la cerveza artesana de Francia que desde hace años ha reivindicado la necesidad que los bebedores de cerveza sepan dónde se produce, sin confusiones ni engaños.
Actualmente el SNBI tiene más de 550 miembros en activo y es la única organización profesional del país que representa exclusivamente a más de 1.800 cerveceras artesanas.
Photo by ludovic MARIN / AFP